El nudismo, entre el arte, la timidez y la naturalidad

Publicado: 4 de marzo de 2015 en Artículos
Etiquetas:, ,

spencer

 

«La timidez es la desconfianza del amor propio,

que deseando agradar teme no conseguirlo.»

***

Nacemos desnudos, hasta aquí todo es naturalidad. Con el tiempo nos vamos apoderando de pudor, de timidez y de vergüenza. Solemos ver la desnudez como algo íntimo, algo que sólo un@s poc@s serán afortunados de poder contemplar y disfrutar. A la desnudez la tratamos un poco como un pequeño tesoro sin darnos cuenta de que tiene simplemente el valor que le queramos dar. El ser humano siempre la ha tratado como una forma de arte. Y eso argumentan muchos practicantes del nudismo. Que sea o no una expresión de arte puede ser discutible. El nudismo como forma natural y artística. Nada malo. Todo lo contrario. Si el cuerpo humano se ve como parte artística porqué se debería taparlo, cubrirlo o esconderlo. A lo mejor es más sencillo tratar el tema como algo personal que permite al que lo practica sentirse algo mejor y más libre.

Si nos adentramos en la historia del arte observaremos que en la misma Grecia antigua el cuerpo humano era el tema por excelencia en las representaciones artísticas, sujeto a cánones de belleza de la época. Tanto para los artistas de entonces como para la sociedad, el culto a esa forma de arte nudista representaba adorar cuerpos ‘perfectos’, establecidos bajo proporciones físicas idóneas. Se buscaba un ideal de cuerpo humano que quizá no existía o era minoritario, pero gracias a los desnudos se intentaba encontrar la perfección o acercarse a ella. En la actualidad, numerosos artistas siguen expresando su arte mediante la desnudez del cuerpo humano, ya sea individual o grupal. Ejemplo tenemos en todos los campos, ya sea en el cine, fotografía, pintura o dibujo. El nudismo atrae e inspira.

Lógicamente, no tiene nada que ver idealizar con la perfección de un cuerpo humano con la representación de arte. El arte en sí mismo es ambiguo, inclasificable, fuera de toda norma. Lo que para unos es arte para otros puede que no pase de ser obscenidad o excentricidad. No por ver nudismo contemplamos arte y es difícil defender la práctica del nudismo argumentando solamente esa razón. Casi es mejor abogar por la práctica de la naturalidad en el ser humano. Estar desnudos nos da un aire de libertad difícil de superar. Para algunos puede ser solamente estando solos, bajo el umbral de la intimidad, pero sin quitarle un ápice de su valor. Para otros, esa libertad puede ser ampliada hasta otros campos, ya sea al aire libre o rodeado de más personas.

spencer-tunick

Aquí ya encontraríamos los prejuicios personales. Llamémosles mezcla de pudor, de vergüenza o de timidez. Complejos que se van uniendo hasta crear una capa compacta que no deja que traspase ni mirada indiscreta, ni unos ojos extraños y desconocidos. Con el pudor, el ser humano defiende su intimidad. La vergüenza puede darse por algún tipo de complejo personal. NO querer que alguien nos descubra por entero, por saber que no somos perfectos, que no somos el ideal. La timidez entra dentro del carácter y personalidad de cada individuo. Algo muy personal que afecta a su vida privada, pública y en sus relaciones personales. Según la psicología suele ser una pauta de comportamiento que limita el desarrollo social de quienes la experimentan en su vida cotidiana. No es ninguna enfermedad. Cada cual tiene su carácter. Hay que respetarlo. Por eso mismo hay que respetar a quien abre su mente y decide experimentar con su cuerpo. Sentir su desnudez como forma de vida. Dar libertad a su cuerpo. Ya sea tomando el sol, paseando o bañándose. Todos los comportamientos deben ser respetados y aceptados. Otra cosa será comprenderlos.

Pero el nudismo ha ido ganando adeptos con el paso de las décadas. Muchas personas deciden realizar actividades cotidianas completamente desnudos como algo natural. No se trata de reafirmarse. No se trata de decir al resto: !Estoy desnudo, mírame! Como tampoco se trata de acciones protagonizadas por personas provocativas o exhibicionistas. De hecho, sí exhiben su cuerpo, pero de una forma personal, sin querer llamar la atención. Y dentro de esa naturalidad radica su atractivo. Escandalizarse por estas acciones humanas puede quedar ya un poco obsoleto y fuera de lugar. La humanidad se une sin querer por unos lazos sociales, todos los componentes del planeta se ven inmersos en los mismos problemas, vicisitudes y necesidades cotidianas. Algunos tienen que estar desnudos debido a su pobreza, no tienen ni la opción de elegir. Otros, debido a su religión, cultura o sociedad nunca podrán manifestarse así si alguna vez lo desean puesto que irían en contra de las normas de conducta, con lo cual quedan atados a la hora de expresarse naturalmente, como seres humanos libres.

El nudismo puede ser una actividad pública o privada. Pero sea como sea, es una forma de expresión humana y natural. Que no muestra nada que no hayamos visto o dejado de ver anteriormente. La importancia que creemos acerca de esa expresión dependerá de nuestro grado de aceptación y tolerancia con quienes la practican. No se trata de estar de acuerdo o no. Es libertad de cada uno y es su derecho. Más le valdría al ser humano preocuparse por otros asuntos mucho menos humanos, intransigentes y que violan y amenazan la libertad de las personas. Todas esas actividades que generan la pérdida continua de derechos de las personas. Todos esos actos que coaccionan las acciones de millones de otras. Menos pensar en morbos y en retorcidas invenciones mentales, menos criticar acciones de libertad en lugar de meter mano al verdadero problema. En definitiva, menos hipocresía, menos normal morales.

spencer-tunick-nude-art211

 

 

 

 

comentarios
  1. Ronie Vigil dice:

    Realmente nos evitariamos de enfermedades mentales respecto al sexo y la sexualidad si realmente nos vieramos desnudos desde pequeños… todo comienza con la curiosidad…

    Me gusta

Deja un comentario