Pablo Neruda

Publicado: 24 de julio de 2013 en Literatura
Etiquetas:, ,

pablo-neruda

«Algún día en cualquier parte,

en cualquier lugar indefectiblemente te encontrarás a ti mismo,

y ésa,

sólo ésa,

puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas»

***

Ricardo Reyes Basoalto nació en Parral (Chile) en julio de 1904 y murió en Santiago de Chile en septiembre de 1973. Un poeta que consiguió lo que muy pocos poetas consiguieron en vida: ser considerado entre los mejores y más influyentes escritores de su siglo. Pero además puso la poesía en un pedestal. Su obra se magnificó, acercando la poesía a rincones insospechados, a hogares que no acostumbraban leerla, a personas que nunca hubieran imaginado que ese arte literario les habría hecho sentir tanto como lo hizo. Su poesía llegó al corazón de muchos de sus seguidores y todavía hoy sigue siendo un escritor venerado. Con diecisiete años ya comenzó a firmar sus obras con el nombre de Pablo Neruda y según parece para evitar a su padre el mal trago de tener que reconocer a un hijo poeta.

Para muchos se trata del poeta más grande que existió en el siglo XX en cualquier idioma. Pero no sólo se atrevió con la literatura, porque sus inquietudes llegaron a la política, alcanzando el puesto de Senador, precandidato a la presidencia de su país e incluso embajador en Francia. Debido a la repentina muerte de su madre cuando solamente contaba con un mes de vida, su familia se estableció en Temuco, donde el pequeño Ricardo se criaría entre lagos, bosques, ríos y montañas. Ese contacto directo con la naturaleza le hizo acercarse a la poesía desde niño. El porqué de la elección de ese nombre y de ese apellido todavía queda en suspense, a pesar de que corren varias explicaciones al respecto.

Con sólo trece años escribió un artículo en el periódico local de Temuco. Y en esa ciudad escribió buena parte de la obra que aglutinaría en su primer libro de poemas : ‘Crepusculario’. Sus colaboraciones en prensa no cesaron nunca. En 1921 ya se instaló en la capital de su país, Santiago, donde estudió pedagogía. Dos años más tarde sería cuando publicaría su primer libro de poemas y un año después, en 1924, su más afamado libro: Veinte poemas de amor y una canción desesperada’. Su estilo estaba dentro de lo que se conoció como ‘modernismo’. Un término que englobaba un movimiento literario en lengua española que se desarrolló entre 1890 y 1910 y que estuvo relacionado en el ámbito de la poesía. Su característica principal fue su ambigua rebeldía creativa, un refinamiento narcisista y una forma cosmopolita y renovada de la estética del lenguaje y de la métrica.

«Cuando crezcas, descubrirás que ya defendiste mentiras,

te engañaste a ti mismo o sufriste por tonterías.

Si eres un buen guerrero, no te culparás por ello,

pero tampoco dejarás que tus errores se repitan» 

***

Pablo_neruda_joven

Con el tiempo su estilo se fue desarrollando por otras vías, manifestando una renovación personal, con intentos de oleada vanguardista y buenos ejemplos de ellos serían sus siguientes obras: ‘El habitante y su esperanza’, ‘Anillos’ y ‘Tentativa del hombre infinito’. Comenzará entonces su etapa diplomática, viviendo en distintos países, como Birmania, Indonesia, Sri Lanka, Singapur, Argentina y España. Durante todo ese periplo conoció a diferentes autores, como a Héctor Eandi, Rafael Alberti, Federico García Lorca, y comenzó a divulgar su particular forma de expresión que bautizó como ‘poesía impura’ abrazando entonces el estilo surrealista.

Cuando estalló la guerra civil española y justo después del asesinato de Lorca se comprometió con el movimiento republicano y de donde nacería su libro ‘España en el corazón’ (1937). Fue ese período de un pensamiento profundo y crítico. Su literatura se embarcaría en emociones y en ideales políticos. En 1945 recibió el Premio Nacional de Literatura en su país y es elegido senador.  Y fue durante ese año que se afilió al Partido Comunista. Pero durante el mandato de González Videla el partido quedó prohibido. Durante la época en que fue nombrado cónsul general de México reescribió ‘Canto General’, que se publicó en México en 1950 y fue clandestino en su propio país. Nada más publicarse se tradujo a más de diez idiomas. Quizá el morbo de ser una obra compuesta por textos que el poeta escribió en momento muy difíciles, cuando vivía en la clandestinidad al ser perseguido por ser miembro del Partido Comunista de Chile.

«La poesía nace del dolor.

La alegría es un fin en sí misma»

***

Su persecución política comenzó ahí. Corría el otoño de 1949. Pasó a la clandestinidad tanto en la capital como en Valdivia. Cruzó hasta Argentina montado a caballo. Su camino le llevó hasta París, donde fue ayudado por varios amigos, entre ellos Pablo Picasso, y logra regularizar su situación. También vivió en Nápoles hasta que en agosto de 1952 recibe la noticia de que ya no era perseguido y regresa a su país. Durante esa época publicó ‘Los versos del capitán’ (1952), ‘Las uvas y el viento’ (1954) y ‘Odas elementales’  (1954). Para 1958 llegaría una nueva obra con un nuevo estilo: ‘Estravagario’. En octubre de 1971 le fue concedido el Premio Nobel de Literatura. Ya en febrero de 1973, por motivos de salud, rechazó el puesto de embajador de Francia. Tras el golpe de estado de septiembre de 1973 su estado de salud se agrava y muere debido a un cáncer de próstata. Su casa de Santiago fue saqueada tras el golpe y sus libros incendiados. Muchos de los asistentes a su funeral fueron víctimas de la represión y muchos de ellos no fueron vistos con vida nunca más.

 LA MUERTE
 He renacido muchas veces, desde el fondo
 de estrellas derrotadas, reconstruyendo el hilo
 de las eternidades que poblé con mis manos,
 y ahora voy a morir, sin nada más, con tierra
 sobre mi cuerpo, destinado a ser tierra.
 No compré una parcela del cielo que vendían
 los sacerdotes, ni acepté tinieblas
 que el metafísico manufacturaba
 para despreocupados poderosos.
   Quiero estar en la muerte con los pobres
 que no tuvieron tiempo de estudiarla,
mientras los apaleaban los que tienen
el cielo dividido y arreglado.
Tengo lista mi muerte, como un traje
que me espera, del color que amo,
de la extensión que busqué inútilmente,
de la profundidad que necesito.
Cuando el amor gastó su materia evidente
y la lucha desgrana sus martillos
en otras manos de agregada fuerza,
viene a borrar la muerte las señales
que fueron construyendo tus fronteras. 

3115638_640px

comentarios
  1. Excelente.
    Un fuerte abrazo.

    Me gusta

Deja un comentario